Tasa de mortalidad infantil

ANÁLISIS DEL INDICADOR

La tasa de mortalidad infantil se calcula como el cociente entre el número de defunciones en niños y niñas menores de un año y el número de nacidos vivos en un territorio y un periodo determinado y multiplicado por 1.000. Se interpreta como la probabilidad de sobrevida durante el primer año de vida de los niños que nacen. Es un indicador muy importante en salud pública, dado que permite evaluar la mortalidad en un grupo poblacional considerado como vulnerable y sujeto de especial protección por parte del Estado.

En el departamento del Huila, durante la serie temporal observada, se evidencia una tendencia al descenso, pasando de una tasa de 15,5 por 1.000 nacidos vivos en 2005 a 7,9 en 2021, lo que significa una reducción del 50%. Entre 2011 y 2019 se ha observado un comportamiento variable con ascensos y descensos del indicador. En 2020 se observó el menor valor de tasa de mortalidad infantil de toda la serie temporal con 7,6, incrementando en 4,9% para 2021 (tasa de 7,9) y para el año 2022 se observó un aumento del 30% en la tasa con respecto al año 2021, alcanzando el valor más alto (10,3 por 1.000 nacidos vivos) desde el año 2016, y con un total de 167 defunciones.

A nivel municipal, Neiva, capital del departamento, ha tenido un comportamiento muy similar en sus cifras y tendencias a lo observado a nivel departamental, con años de mejor (7 años) y peor comportamiento (11 años). Para el año 2022, alcanza una tasa de 12,2 muertes infantiles por 1.000 nacidos vivos, con 58 defunciones, superior a la tasa departamental y nacional. De igual manera, para el año 2022 los municipios con mayor tasa de mortalidad infantil superando la tasa nacional fueron Nátaga (29,7), Campoalegre (25,0), Gigante (24,2), Agrado (19,6), Hobo (17,9), Íquira (16,3), Palermo (15,6), Villavieja (14,9), Suaza (13,8), Palestina (12,4) y Neiva. Por otra parte, los municipios de Aipe, Altamira, Baraya, Colombia, Elías, Paicol, Teruel y Yaguará no presentaron muertes infantiles en 2022.

Al observar el indicador en su desagregación por área, entre 2005 y 2012 tuvo un comportamiento variable sin una tendencia definida de mayor o menor tasa para un área específica. Por el contrario, en el periodo 2013 a 2019, las tasas urbanas fueron menores a las rurales, y se invierte el patrón en los dos años de pandemia 2020 y 2021, cuando en el área rural se obtuvieron tasas de 6,66 y 7,08, frente a 8,22 y 8,28 del área urbana, respectivamente para los años en mención. En el año 2022 se observó mayor tasa de mortalidad infantil en el área urbana con 10,6 por 1.000 nacidos vivos y 98 muertes; en área rural alcanzó una tasa de mortalidad de 9,8 con un total de 69 defunciones.

Para el cuarto trimestre del 2023, como dato preliminar, se han reportado 130 defunciones en menores de un año en el departamento del Huila con una tasa de 8,6 por cada 1.000 nacidos vivos. Los municipios con mayores tasas de mortalidad infantil fueron: Hobo, Palestina,  Pital y Altamira presentan tasas de mortalidad infantil superiores a 28 por 1.000 nacidos vivos; por el contrario en 7 municipios del departamento no se presentaron muertes en menores de 1 año durante el primer semestre de 2023: Colombia, Elías, Nátaga, Tello, Teruel, Tesalia y Villavieja. En el área urbana se presentaron 70 defunciones para una tasa de 8,2 y en el área rural fueron 56 defunciones, alcanzando una tasa mayor de 8,5 por 1.000 nacidos vivos.

En comparación con el nivel nacional, el departamento del Huila presenta menores tasas de mortalidad infantil en todos los años de la serie observada, con un comportamiento similar, aunque con mayores variaciones. Para los años 2020 a 2022 se observó un patrón similar: descenso en 2020 frente a 2019 y ascenso en los 2 años posteriores. La tasa de mortalidad infantil para 2022 en el Huila ha sido la más alta desde el año 2014, y de igual manera, para el nivel nacional, la tasa de este mismo año es la más alta desde el año 2012. Para el año 2022, aún dato preliminar, la tasa departamental fue de 10,3 inferior a la cifra nacional que alcanza 11,5 defunciones infantiles por cada 1.000 nacidos vivos.

Los casos presentados están relacionados con los determinantes sociales, patologías, desconocimiento de la prevención, cuidado de los menores en el hogar, identificación de riesgos, baja adherencia a la valoración integral en el marco de las Rutas Integrales de Atención en Salud (RIAS) en personal médico y cuidadores, para lo cual se vienen realizando asistencias técnicas a los municipios  para el seguimiento de la primera infancia con defectos congénitos e hipotiroidismo, participación intersectorial en las Mesas de Niños-Niñas y Adolescentes (NNA) del departamento. Adicionalmente, se viene realizando asesoría a las Direcciones Locales de Salud (DLS) en los ajustes del Plan de Acción en Salud (PAS) con la ejecución de las actividades del Plan de Intervenciones Colectivas (PIC), para la prevención de enfermedades en la niñez, con el fortalecimiento de la red comunitaria en el uso de los tres mensajes claves, se hizo asistencia técnica a los municipios para la adherencia a la Ruta de promoción y Mantenimiento de la Salud, fortaleciendo las actividades de detección temprana de las alteraciones del niño, así como la consulta de valoración integral por médico y enfermería, como derecho ineludible y en garantía a la salud oportuna, articulación de acciones para la difusión de las dieciocho prácticas clave de la estrategia AIEPI comunitario, para la prevención de las enfermedades prevalentes de la infancia, así como fortalecimiento de AIEPI clínico y de red local. Se hizo una zonal en la zona norte y en cada municipio visitado con el objetivo de desarrollar mayores capacidades en la valoración de la RIAS, instrumentos como la Escala Abreviada de Desarrollo-3 (EAD3), adherencia a las guías de práctica clínica, además de las unidades de análisis y la construcción de los planes de mejoramiento, con el fin de optimizar las intervenciones en salud para el bienestar de la niñez.